Este jardín botánico tiene una historia un tanto peculiar.Pertenece a Emasesa, empresa que suministra y gestiona el abastecimiento y saneamiento de agua en Sevilla.
Se encuentra situado en El Carambolo, justo al lado de los depósitos de agua que abastecen a la ciudad y que se encuentran en un lugar elevado.En el año 1986, con la colaboración de la facultad de biología de la universidad y con la finalidad de proteger los depósitos de agua anexos a la misma, se crea este jardín botánico, algo desconocido para el visitante pues no se le ha dado publicidad.
El acceso al mismo a pie es imposible, hay que disponer de vehículo o bien usar transporte público, pero hay que tener en cuenta su proximidad a la ciudad de Sevilla, a solo 5 km de la misma.Saliendo por la carretera de la autovía de Huelva, llegaremos hasta un desvío que conduce al pueblo de Camas, desde donde nos dirigiremos, en un cruce que lleva a la autovía de la plata a una carretera local que lleva a la población de Castilleja.Comenzaremos a subir la cuesta, llamada del caracol por la curva cerrada que presenta, y al final de la misma podremos localizar sin problemas un jardín con un aparcamiento anexo.Si se usa transporte público, la línea M-160 que sale de la estación de autobuses de Plaza de Armas, tiene parada frente al arboreto.
El acceso al mismo se lleva a cabo a través de una estrecha puerta donde tenemos que pagar la entrada y encontraremos una pequeña sala con algunas publicaciones sobre las especies que se encuentran en el mismo, editadas por la empresa de aguas.Desde allí, pasamos al jardín botánico propiamente dicho.Tiene 4 hectareas de superficie y dispone de unas 600 especies plantadas.En el recorrido que efectuaremos, podemos ver las distintas especies que son identificadas por unas pequeñas tablas donde figura su nombre científico y el nombre vulgar.Las plantas se han agrupado en zonas segun su tipo, aromáticas, arbustos, medicinales, etc.Encontraremos dos lagunas con un arroyo donde hay tambien plantas acuaticas. Tambien encontramos diversos árboles a lo largo del recorrido.La limpieza y el mantenimiento son buenos, lo cual hace más atractivo el lugar.
Sin embargo, quizas lo mejor de este jardín botánico son, junto con las plantas, las vistas de la ciudad de Sevilla que desde el mismo se divisa.Su emplazamiento en alto, nos permite desde el jardín contemplar toda la ciudad de Sevilla, en una bella panorámica mientras recorremos el jardín.
El inconveniente principal son los horarios de visita, escasos y la falta de publicidad que se le ha dado al mismo.
Los amantes de la botánica encontrarán aqui numerosas especies en un bello lugar.
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